Un estudio que realizó la cominudad de Madrid curso 2012-2013 ha demostrado, al igual que el reciente estudio Aladino (2013)realizado a nivel nacional, que ha disminuido mucho la práctica diaria de
actividad física en forma de juegos al aire libre, desplazamientos a
pie, excursiones, deportes,... Esta disminución es mucho más preocupante en el caso de las niñas que
en el de los niños, debido esencialmente a que nuestra sociedad
promueve modelos femeninos poco activos que se concretan en un tipo de
juego infantil más sedentario. Por otra parte, ha aumentado el tiempo
diario dedicado a actividades sedentarias (tiempo que pasan delante de
una pantalla: televisión, ordenador, consola, móvil…) actividades que,
además, se asocian con frecuencia a un consumo de alimentos muy
calóricos (patatas fritas, chucherías, bebidas azucaradas)
Como docentes ahora nuestra pregunta es ¿Qué podemos hacer nosotros desde nuestros colegios para ayudar a que estos resultados mejoren?
Aquí no solo los maestros somos los que tenemos que ponernos manos a la obra, sino la sociedad en su conjunto; autoridades, televisión, familias.......todos tenemos muchos deberes por hacer y debemos ponernos manos a la obra pero de manera conjunta, si no, no obtendremos ningún resultado mejor, y los porcentajes de alumnos con sobrepeso seguirán aumentado.
Como muy bien has descrito a través de una conclusión, la sociedad actual promueve una serie de actividades que encadenan a los alumnos a llevar una vida mayoritariamente sedentaria, perjudicando así su salud y bienestar.
ResponderEliminarLa escuela debe tener un compromiso directo frente a esta problemática.
Personalmente considero que la escuela debe tener en cuenta dos aspectos a seguir:
1. Cooperación y diálogo con las familias: Los maestros y/o la escuela debe tener en cuenta que aunque los padres tengan muchas responsabilidades sobre sus hijos, muchos de los familiares no tienen formación sobre la educación sobre la salud. Así pues creo que es de vital importancia empezar a incorporar en las escuelas diversas propuestas (talleres, conferencias, asambleas..) para poder formar a los padres en diferentes aspectos relacionados con la salud de sus hijos.
2. Trabajo en la escuela: Como bien sabemos, los padres juegan un papel importante en la vida saludable de sus hijos, pero la escuela debe llevar a cabo una educación dirigida a la adquisición de competencias y conocimientos sobre los hábitos saludables (ejercicio físico, nutrición...)
Un aspecto a tener en cuenta es la promoción de la actividad física dentro de la escuela como principal objetivo de la educación en salud, ya que la educación infantil (en este caso) requiere un gran respeto hacia el juego y la actividad física en sus alumnos.